Estas viviendas nacieron para reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, evitando el uso de combustibles fósiles y aprovechando el de las fuentes de energías renovables. Por ello, las casas “autosuficientes”, se caracterizan por su limitada demanda de energía (tanto para calentarse como para refrigerarse o iluminarse).
Así, un edificio de estas características es capaz de:
- generar todo lo que necesita consumir (agua y energía, principalmente), de una forma sostenible y eficiente.
- la energía la obtiene de placas solares situadas en la cubierta
- el agua la consigue recogiendo el agua de lluvia en un aljibe
- además es capaz de reutilizar las aguas grises para regar el jardín y las plantas del invernadero.
Estos son los pilares básicos de las casas autosuficientes, aunque va mucho más allá: por ejemplo, combina placas solares fotovoltaicas para la obtención de electricidad, con térmicas para el agua caliente. También utiliza células fotovoltaicas semi-transparentes en las ventanas para obtener la máxima energía posible del sol.
Por si eso fuera poco, también plantea la posibilidad de utilizar el terreno como fuente de calor en invierno y frescor en verano, gracias a la temperatura constante de la tierra, amén de disponer de una ventilación eficiente con la que minimizar las necesidades energéticas de la vivienda.
En definitiva, son hogares más respetuosos con el medio ambiente y serán más económicas en un corto periodo de tiempo, gracias a su independencia energética.
Así, antes de dar vida a este tipo de casas se debe estudiar el clima, la orientación, la trayectoria del sol, los vientos predominantes, la vegetación del entorno, el potencial de aprovechamiento de la luz natural… Todo es esencial para establecer el diseño final de un hogar en el que el estándar Passivhaus es bienvenido. Y eso se nota en, por ejemplo, el aislamiento térmico de la vivienda.
En líneas generales, una casa que se haya diseñado teniendo en cuenta criterios bioclimáticos o pasivos puede llegar a consumir entre un 70% y un 90% menos que una vivienda convencional.