Estas tendencias van a definir parte del futuro de las empresas. ¿Las adoptarán?
La economía circular es el modelo de negocio más atractivo al que las empresas deben comenzar a migrar. No solo porque es rentable, también porque tiene la capacidad de generar un impacto positivo en las comunidades, compañías y en el planeta.
Este modelo proporciona oportunidades para crear bienestar, crecimiento y empleo, a la vez que reduce las presiones ambientales. El concepto puede, en principio, aplicarse a todo tipo de recursos naturales, incluidos materiales bióticos y abióticos, agua y tierra.
Por otra parte, se busca que el valor de un producto se mantenga en la economía durante el mayor tiempo posible y que se cumpla un ciclo completo para que al final regrese al proveedor y este pueda hacer una gestión responsable.
Así que a inicios de este 2021, vale la pena tomarse un momento para considerar cómo ha surgido y evolucionado el concepto de economía circular.
3 tendencias de economía circular para 2021
Te compartimos tres tendencias que definieron la economía circular en 2020 y lo que podrían significar para este año.
1. La reutilización va en aumento
A pesar de algunos contratiempos planteados por la pandemia derivada de COVID-19, la tendencia de cambiar los envases de un solo uso a los reutilizables está cobrando un impulso real e importante.
En 2021, la presión para que las empresas de alimentos y bebidas adopten esta tendencia será crucial, ya que últimamente llevan un ligero retraso con sus pilotos y una falla general para avanzar lo suficientemente rápido hacia los compromisos para hacer que todos los envases sean reciclables, compostables o reutilizables para 2025.
Si las marcas y los minoristas tienen la intención de cumplir con sus compromisos públicos, se necesitará ver una inversión real en plataformas y sistemas de reutilización durante el próximo año.
2. Las métricas comienzan a materializarse
Para las personas expertas en la materia, en el 2020 se vio un avance en herramientas y estándares para calcular y rastrear la naturaleza circular de productos, negocios y sistemas.
Como en el caso del Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible que publicó the Circular Transition Indicators; la Fundación Ellen MacArthur lanzó la herramienta Circulytics , mientras que el GRI estableció un nuevo estándar sobre residuos y el Cradle to Cradle Products Innovation Institute lanzó the fourth version of its product standard.
Este compromiso pulió y fortaleció la promesa de la economía circular, sin embargo, se requiere más atención en desarrollar informes que demuestren todos los resultados alcanzados por medio de la economía circular.
Además, se buscarán datos y análisis sobre el vínculo entre el cambio climático y la economía circular, así como las áreas de oportunidad para mitigar las emisiones de carbono mediante estrategias de economía circular.
3. Se trata aún de plástico
El plástico sigue siendo la estrella del show en lo que respecta a la conversación global sobre la gestión de materiales y las soluciones de economía circular, sobre todo con la creciente demanda de este producto en medio de la pandemia, que ha provocado un aumento en la entrada de desechos plásticos a las vías fluviales y océanos.
Aunque no todo es malo, el 2020 también permitió que las personas conocieran más sobre el mundo del plástico y su impacto, lo que podría detener la marea de la contaminación plástica.
El 2021 probablemente traerá una tensión continua entre el problema de los desechos plásticos, la producción y uso del plástico. Sin duda, durante este año y los que siguen, los grupos de interés colocarán los reflectores hacia los compromisos y acciones de sus empresas favoritas. Veamos como reaccionarán…